Las algas llegan a nuestra mesa
Las algas crecen a lo largo y ancho de todo el planeta. Las podemos encontrar en distintas formas y tonos, pero normalmente se clasifican por su color: verde, rojo y marrón. En algunos países de Asia forma parte de la dieta cotidiana, como es el caso de Japón y China.
Pero también existen platos tradicionales europeos que están confeccionados en base a este alimento. Quizás el más famoso sea el laverbread galés, que es una especia de pasta de algas. En la entrada de hoy vamos a hablar de las algas. Conoceremos sus características nutricionales, beneficios para la salud y la mejor receta para disfrutarlas en todo su esplendor.
Propiedades de las algas
Las algas tienen un sabor delicioso y son muy sanas. Además, combinan a la perfección con distintos platos y se conservan fácilmente durante mucho tiempo. Destacan por sus altos niveles de minerales, fibras, antioxidantes y proteínas. Especialmente el yodo, un oligoelemento indispensable para favorecer el metabolismo celular.
Esta sustancia se encuentra principalmente en pescados y mariscos. Por lo que las algas son la mejor alternativa para que los veganos incluyan este mineral en su dieta. Por la misma razón, no se recomienda su consumo a personas que padezcan de hipertiroidismo, ya que deben llevar un control exhaustivo sobre las sales consumidas.
Las algas también son una fuente natural de fosforo, hierro, potasio, selenio y calcio. Así como vitamina A y C, betacarotenos, fibra y antioxidantes que retrasan el envejecimiento de las células. También mantienen nuestra piel en mejor estado, devolviendo la firmeza y elasticidad de la juventud.
Beneficios para la salud
El calcio, magnesio y fósforo presente en las algas ayudan a mantener los huesos y dientes sanos, favoreciendo la formación ósea y previniendo enfermedades como la osteoporosis. Por su parte, el hierro y la vitamina C es muy eficaz para combatir la anemia.
Las algas también facilitan la digestión y tienen un efecto saciante, por lo que son muy recomendables para dietas equilibradas y de adelgazamiento. Son esenciales para la salud cardiovascular, ya que apenas tienen grasas serán nuestras mejores aliadas para controlar los niveles de colesterol LDL. Que es lo que popularmente se conoce como “colesterol malo”.
¿A qué saben las algas?
En 1908, el químico japonés Kikunae Ikeda estableció los 4 sabores clásicos de las algas: salado, dulce, ácido y amargo. Hace unos años, se ha añadido un 5ª sabor llamado umami. No solo está presente en estas plantas marinas, sino también en otros alimentos como el tomate, los champiñones o el queso.
Las algas en la cocina
Si vas a usar algas en tus platos, te aconsejamos que eches poca cantidad. Esto es debido a que su sabor y nutrientes están muy concentrados. Y siempre hay que cocinarlas, ya que en crudo la cantidad de yodo es todavía más elevada. Son habituales en todo tipo de recetas, desde refrescantes smoothies, ensaladas y postres.