La ensaladilla rusa en el mundo

sansse bar donostia

La ensaladilla rusa es una receta muy típica en países de Europa, América y Asia, ya que además de estar muy buena es relativamente rápida y fácil de hacer. Aunque existen muchas variantes, por norma general los ingredientes básicos son las patatas, mayonesa y otras hortalizas como zanahorias o aceitunas. En la entrada de hoy vamos a ver cómo ha evolucionado este plato a lo largo del tiempo y os mostraremos cómo se elabora en países como Argentina o Costa Rica.

El origen de la ensaladilla rusa

Prácticamente todo el mundo atribuye el mérito de esta receta a Lucien Olivier, chef franco-belga afincado en Moscú durante el siglo XIX. Pero la verdad es que anteriormente encontramos referencias a este plato, como por ejemplo en “The Modern Cook” de Charles Elmé Francatelli, publicado en 1845. Aquí tenemos la primera referencia a una “russian salad”, que llevaba langosta, anchoas, cangrejos y alcaparras mezclados con mayonesa.

No obstante, fue la receta de Olivier la que se acabó imponiendo a las demás, debido en parte a la repercusión que tuvo su restaurante, el Hermitage, inaugurado en 1864 en pleno centro de la capital rusa. Era un plato heredero de la cocina francesa, bellamente decorado y bastante caro. Entre sus ingredientes podemos destacar la perdiz, la carne de urogallo o el caviar, que junto a patatas cocidas, huevos y pepinos eran coronados por mayonesa, mostaza y otras especias.

La ensaladilla rusa en nuestro país

En nuestro país, este plato apareció formalmente por primera vez en 1858 en un libro llamado “La cocina moderna”. Fue obra de Mariano Muñoz, que estaba al cargo de las cocinas de los condes de Campo Alange. Esta ensaladilla era prácticamente idéntica a la italiana y consistía en una combinación de legumbres, verduras y carnes que se servían en frío.

Años más tarde, en 1892, encontramos una evolución de la receta en el Diccionario general de cocina de Ángel Muro. Se desmarcaba por completo de la ensalada rusa imperial, que por aquel entonces incluía perdiz, caviar o salmón y estaba reservada a la clase alta. En este sentido, el autor hace referencia a una ensaladilla (en diminutivo) elaborada con hortalizas económicas y que era servida habitualmente en los bares como tapa junto al vino.

La ensaladilla rusa en América

En las últimas décadas del siglo XIX Argentina acogió a una gran cantidad de inmigrantes procedentes de Rusia, que entre otras cosas trajeron consigo la receta de la ensaladilla. Como era muy sencilla de preparar y los ingredientes se encontraban sin problemas, muy pronto se popularizó en el país sudamericano. Sin embargo, la variante que más fama tuvo fue la de los alemanes del Volga, que llevaba patatas, zanahorias, mayonesa, guisantes y pollo.

Por su parte, en Costa Rica es frecuente encontrar esta receta como acompañamiento del casado, un plato tradicional que se prepara a partir de carne o pescado, arroz, frijoles (alubias) y plátano frito. En este país, la ensaladilla se elabora con patatas, mayonesa, huevo duro y remolacha, aunque también se le puede añadir zanahorias, guisantes y maíz.

Algo similar ocurre en Perú, donde la ensaladilla rusa es la principal guarnición del pavo o el lechón al horno, una delicatesen que es muy habitual en las cenas navideñas. Esta receta es muy similar a la anterior y lleva patatas, mayonesa, guisantes, zanahorias, maíz y remolacha.

Si te ha entrado el gusanillo leyendo la entrada de hoy, pásate por Sansse, nuestro restaurante situado en pleno centro de Donosti. Podrás disfrutar de la mejor ensaladilla rusa y otros platos típicos de nuestra gastronomía. ¡Te esperamos!